¿Cómo tratar las grietas en el pezón?
Son muchas las mamis lactantes que se encuentran en esta situación y se hacen esta pregunta pero, desafortunadamente, no siempre reciben la ayuda correcta.
La lactancia está rodeada de gran cantidad de mitos y no todos los profesionales de la salud tienen formación actualizada con respecto a este tema. Es por eso que aprovecho esta entrada para intentar daros respuesta a una situación muy molesta y dolorosa.
¿Qué causa las grietas del pezón?
Lo primero que tenemos que hacer es tratar de resolver la causa de las grietas.
La respuesta, en la mayoría los casos, es que se deben a un mal agarre. Si el peque no se engancha bien al pecho intenta de alguna forma corregir y sacar esa leche que necesita, de manera que la mala postura está dañando el pecho ocasionando así las grietas.
Este mal agarre puede deberse simplemente a una posición incorrecta que hay que corregir, o a una causa física como un frenillo no detectado. Es muy importante encontrar el origen y corregirlo para evitar así no solo las grietas, sino varios problemas que pueden venir derivados de él, como sería la insatisfacción del bebé al no obtener el alimento necesario y las obstrucciones y mastitis secundarias al mal vaciado del pecho.
Todas estas circunstancias, si no se tratan, pueden derivar en un fin de la lactancia materna no deseado.
Muy bien, ya sabemos el origen y vamos a trabajar en ello pero…
¿Cómo curar las grietas en el pezón?
A esto os respondo con otra pregunta, ¿qué es una grieta? Pues no es más que una herida, solo que tenemos la mala suerte de que se encuentra en una zona a la que se da mucho uso, con lo que la molestia y el dolor que causa es más constante y tarda más en cicatrizar.
Sin embargo no os asustéis, que por suerte no está todo perdido. Aquí os dejo algunas recomendaciones para intentar poner fin a tan molesta situación.
Eso sí, me reitero, tened en cuenta la importancia de resolver la causa de las grietas, ya que sino nada de lo que hagamos servirá mientras haya algo que las siga ocasionando.
- Lavar el pecho con agua y jabón unas 3 veces al día. Esta es sin duda la mejor forma de limpiar cualquier herida. El pecho no es una zona que se ensucie mucho, así que con esta medida nos aseguramos que lo estamos manteniendo limpio.
- Dejar el pecho al aire para mantenerlas secas. Otra medida estándar para tratas las heridas (aquellas que se puedan dejar descubiertas claro). De esta forma estamos permitiendo que la zona respire, no roce con la ropa y esté seca para favorecer así su cicatrización.
- Si hay opción, estar un rato al sol. Esta medida es complementaria a la anterior.
- No es necesario usar lanolina ni ninguna crema el pezón(salvo caso de infección/mastitis en que un sanitario recomiende alguna específica). Las cremas mantienen la herida húmeda y al final lo que consiguen es que esta se macere, logrando por tanto el efecto totalmente contrario a lo que queremos conseguir, que es mantener las grietas secas.
- No es recomendable usar la propia leche para tratar las grietas, pues si hubiera una infección lo que estaríamos logrando es la proliferación de bacterias en lugar de su eliminación.
- En caso de que tire mucho se puede aplicar un poco de aceite de oliva para suavizar, ya que además de ser inocuo también tiene agentes anti – infecciosos.
- Como en el punto anterior, se pueden usar discos de hidrogel para aliviar las molestias, ya que hidratan un poco la zona y tienen efecto refrescante.
- Ocasionalmente y si vemos que la lactancia se puede ver afectada, ya que no habría que suspenderla, se puede probar con pezoneras hasta que las grietas se resuelvan o se tolere la lactancia.
Recordad ante todo que la lactancia NO DEBE DOLER. No es necesario hacer callo en el pezón para prevenir el dolor, ni tratar el pecho de manera previa para prevenir las grietas. La lactancia es un acto natural que así debe permanecer.
Si vuestra lactancia es dolorosa, aunque no haya grietas (aún) os recomiendo que consultéis con alguna asesora de lactancia o que acudáis a un grupo de apoyo a la lactancia, para valorar vuestro caso y poner solución al problema que hubiera antes de que de lugar a un resultado que no queramos.